Versace vuelve a colocar a Kate Moss como la protagonista de una nueva campaña. Desde su última producción junto a Naomi Campbell, Linda Evangelista y Christy Turlington, la modelo sigue dejando a todos encantados con la versatilidad que siempre la ha caracterizado.

Esta vez es la misma Kate quien se regocija de sus 10 años de la mano de Versace. Como ya es costumbre se trata de una campaña en la que Kate tendrá que quitarse la ropa. Parece que se trata de un hobby para la modelo mostrar muchísima piel mientras es fotografiada, sin embargo, esta campaña viene dotada de una increíble influencia de los 90, donde se deja atrás el erotismo y vuelca nuestras cabezas un poco más hacia el punk.

Junto a la británica veremos los rostros que han ido desplazando a las grandes modelos de la campaña de verano. Joven y fresca llega Saskia de Brauw de cabello platinado y corto para hacerle referencia los años rebeldes del punk y no a la crisis de identidad de Miley Cyrus. Siguiendo con las líneas habituales de Versace en las que en cualquier campaña es imprescindible una imagen masculina, los creativos han optado por los modelos Travis Smith y Matt Trethe.

Al parecer los colores vivos lograrán sobrevivir al verano y luego de él, muchas campañas estarán dotadas de excéntricas tonalidades o por lo menos es lo que propone versase, con abrigos llenos de amarillo, con manchas y bolsos entregados a la piel.

Mientras que Kate se desnuda con bolsos y abrigos, los fantásticos Mert Alas y Marcus Piggott presentaron a Saskia con un enterizo en cuero menos elegante y más seductor, jugando además con muchísimos estampados como es de costumbre en las propuestas masculinas.

Rosshanna Bracho / missmonroee