La moneda argentina sufrió este miércoles la mayor devaluación en un sólo día desde 2002 y acumula una caída de 8,43% en el año, en una agitada jornada financiera marcada por un ambiente de incertidumbre.

El gobierno de la presidenta Cristina Kirchner impulsa la depreciación monetaria frente a las presiones de grandes corporaciones económicas, que observan una pérdida de competitividad de sus productos frente a una inflación anual de 28%, según las consultoras privadas.

La tercera economía de Latinoamérica, según los analistas, necesita recuperar la confianza de la comunidad internacional y decidió frenar la sangría de reservas monetarias con medidas draconianas, como prohibir la venta de dólares para ahorro, limitar las importaciones y poner un tributo de 35% al turismo en el extranjero.

La última decisión, adoptada este miércoles, fue aumentar los controles y restricciones a las compras por internet al exterior, un mercado que mueve 350 millones de dólares anuales, y sobre el cual pesa un recargo de 50% sobre compras superiores a los 25 dólares.

La presidenta Kirchner reapareció este miércoles por primera vez en más de un mes en un acto público, y durante su intervención, transmitida por cadena nacional, omitió hacer referencia a esos temas.

«Este año la devaluación le va a ganar a la inflación. El problema es que solo con devaluación no se corrigen fallas de la macroeconomía», dijo a la AFP el economista jefe de la consultora Econométrica, Ramiro Castiñeira.

Pero en Argentina no se observa aún un escenario de crisis como en 2001, cuando entró en la mayor cesación de pagos contemporánea, con una recesión brutal, desempleo y pobreza estimada en 57%, ya que el entorno regional e internacional no es el mismo. La economía argentina ahora conserva alta dinámica de consumo, bajo desempleo, desendeudamiento y subsidios que atenúan la pobreza.

Si la tendencia sigue, las finanzas tambalean

La incertidumbre cambiaria hizo caer las reservas monetarias de 42.000 a 30.000 millones de dólares en 2013 y ubicarlas ahora en 29.500 millones, el nivel que tenían en 2006.

Los analistas consideran que si la tendencia de pérdida de divisas continúa, Argentina podría tener problemas para honrar la deuda y las importaciones de energía, con un escenario de crisis en el sector externo (divisas).

«El tipo de cambio quedó atrasado. El dólar oficial es uno de los bienes más baratos del país. Todo subía menos el dólar y en algún momento esto iba a suceder. Era predecible», dijo Castiñeira al hablar de la devaluación en curso.

Sorpresivamente, el Banco Central, que administra el tipo de cambio oficial en coordinación con el gobierno, dejó fluir el mercado el miércoles sin intervenir con compras o ventas, lo que disparó el precio del billete verde tras una fuerte demanda.

Las pizarras oficiales mostraron un valor del dólar que rompió la barrera de 7 pesos, a 7,12 pesos, con un nivel de depreciación en un día que no se registraba desde el 18 de abril de 2002, en plena secuela del colapso económico de 2001.

Pero «por ahora Argentina tiene mejor perfil de vencimientos de la deuda que naciones de Europa. Y el nivel de reservas aún previene cualquier ataque especulativo», dijo a la AFP Pablo Tigani, director de la consultora Hacer.

Más trabas a la salida de dólares

En las últimas 48 horas, Argentina impuso nuevas trabas y restricciones a las compras minoristas al extranjero por internet.

El gobierno limitó el miércoles a dos veces por año la posibilidad de comprar en el exterior a través de la web, sin pagar impuestos, artículos que cuesten hasta 25 dólares.

«La medida va a ser impopular. Quieren poner una nueva piedra en el camino para desalentar a la gente. A mí me da lo mismo. Llegan miles de paquetes al correo y no van a poder controlarlos todos», comentó a la AFP Miguel Ramírez, un médico de 55 años.

Ramírez dijo que «de China te ponen la etiqueta ‘gift’ (regalo) y llega directamente a tu casa, sin pagar impuesto».

La mayor participación en estas compras por la web la tienen los portales asiáticos, entre ellos Alibaba.com, más grande que E-Bay y Amazon juntos, cuyos visitantes argentinos crecieron el último año un 96%, según la consultora comScore Media Metrix.