Los clasificadores de residuos se movilizan con sus carros frente a la explanada de la Intendencia de Montevideo. El motivo: la prohibición de circular con sus carritos por Ciudad Vieja y otros puntos de la capital, y la falta de alternativas laborales.

El colectivo reclama además un salario base de $ 15.000 para los trabajadores de las plantas de reciclaje creadas por la comuna. Por su parte, se quejan por el «entierro» de residuos reutilizables.

Desde las 11:00, los clasificadores se concentraron en tres puntos para luego movilizarse hasta la comuna. Los carros partieron desde General Flores y Propios, 8 de octubre y 20 de febrero, y el viaducto de Paso Molino.

El presidente de la gremial, Juan Carlos Silva, dijo a El Espectador que si las autoridades no los reciben ya tienen todo organizado para acampar en la Intendencia.

«Contamos con el apoyo de distintos gremios y de varios implementos, como baños químicos y comida para quedarnos el tiempo que sea necesario», señaló Silva. «Eso se dirimirá en el momento de la llegada», aclaró. «Lo que se pide es que sean prácticos y den soluciones laborales a la gente en lo inmediato», completó.

En lo que se refiere a las dos plantas de reciclaje creadas por la Intendencia para sacar a los clasificadores de las calles, señaló que dan trabajo solamente a 68 personas de unas 3.188 que son las que recolectan y clasifican residuos, según cifras oficiales.

El director del Departamento de Desarrollo Ambiental, Juan Canessa, afirmó además que más de 200 clasificadores ya han abandonado la actividad para ingresar a programas de inserción laboral.

Silva dijo, por su parte, que son más de 9.000 los recolectores y que el censo no fue obligatorio.

En la actualidad operan dos plantas de reciclado, en el Cerro de Montevideo y en «Chacarita de los Padres». Las otras dos plantas que están en construcción, estarán ubicadas en Avenida Burgues y Aparicio Saravia, y la otra en Camino Durán.

Silva señaló que actualmente los trabajadores en las plantas ganan unos $ 6.880,«cuando les habían prometido que iban percibir salarios de entre $ 15.000 y $ 18.000». Informe de Espectador