Uruguay, enero de 2015.- Mariana Arias es modelo, conductora, actriz, madre, amiga y por encima de todo eso, mujer. Desde esa múltiple perspectiva resolvió emprender el desafío de reunir en un libro los testimonios de figuras de múltiples ámbitos que analizan el pasaje de las mujeres por el climaterio, una etapa colmada de cambios, que marca el transcurrir de una etapa de juventud hacia un nuevo descubrimiento.
Poise, la marca experta en climaterio de Kimberly-Clark, respaldó este emprendimiento y acompañó a la escritora en la presentación de “Una mujer en la mitad de la vida”, una obra en la que figuras como Georgina Barbarossa, Patricia Sosa y Gino Bogani expresan su percepción sobre esta circunstancia de la vida.
“Nos transformamos a cada paso y nos perdemos a veces. Compartir experiencias con otras mujeres, sin disfraces, puede ser una forma de entender los temores, las vivencias, las carencias. Reflexionar juntas, preguntarnos juntas, poner en común quiénes somos, nos acerca más a nosotras mismas”, señaló Arias.
La obra, que consta de 17 capítulos colmados de anécdotas, consejos y reflexiones, apunta a responder las preguntas de las mujeres que se encuentran cercanas a los 50 años de edad y se sienten plenas de energía. Esa etapa, para la cual Kimberly-Clark acuñó el término “maduritud”, conlleva dudas e incertidumbres, pero constituye el punto en que la juventud y la madurez coexisten, colmando a la mujer de una energía potenciada por la experiencia.
El libro “Una mujer en la mitad de la vida” fue presentado en Uruguay por Arias en una conferencia realizada en el restaurante Floreal de Punta del Este, en un encuentro conducido por la periodista Adela Dubra, en el que intercambió opiniones con las asistentes y analizó en detalle las ventajas de llegar a la “maduritud”.
Eugenia Cobanera, encargada de marketing de Kimberly-Clark, señaló que POISE resolvió acompañar el proyecto por entender que había “llegado el momento de llegar a las mujeres con un lenguaje claro. Este libro nos pareció la forma más directa de generar una comunicación adecuada con cientos de mujeres que se encuentran en esta etapa y buscan respuestas. La ‘maduritud’ está lejos de ser el fin: es el comienzo de una etapa maravillosa que debe ser vivida con alegría para hacernos sentir plenas”.
