En una zona montañosa de Haití, CSI Ingenieros encabeza junto a la empresa argentina AC&A, el proyecto de recuperación de la ruta Nº 1, fundamental para el desarrollo logístico de la isla. Ubicada entre las zonas portuarias de Port au Prince y Cap Haitien, la carretera presenta en algunos tramos un nivel de deterioro elevado, que dificulta el transporte mercancías y personas entre las mencionadas ciudades.

 

En enero de 2014, CSI Ingenieros comenzó a desarrollar tareas de supervisión de obra para la reconstrucción de un primer tramo de 26 kilómetros de longitud, que une las localidades de Gonaïves y Ennery. En febrero de 2015, se sumaron otros 23 kilómetros que vinculan esta última ciudad con Plaisance.

 

Gabriel Abraham, jefe de la Unidad de Vías y Transportes de CSI Ingenieros, indicó que “Haití constituye uno de los focos principales de interés de la empresa. Queremos desarrollar más obras allí, y ya nos presentamos para la licitación de otras propuestas, como los planes para acercar el agua y el saneamiento a la población”.

 

La tormenta tropical Jeanne en 2004, y el paso sucesivo de los huracanes Ike y Hanna en 2008, impactaron en la infraestructura de la región de Gonaïves. La ruta N° 1 quedó cortada en cinco lugares, luego que las orillas del río Ennery fueran socavadas por un derrame torrencial, que arrastró toneladas de metros cúbicos de sedimentos provenientes de las cárcavas situadas aguas arriba.

 

“La reconstrucción de esta porción de la ruta N° 1 facilitará los desplazamientos entre las tres principales ciudades de Haití, que son Port au Prince, Gonaïves y Cap Haitien. La rehabilitación de este vínculo vial que une el sur y al norte del país, mejorará la calidad de vida de las poblaciones locales, facilitará el transporte de mercancías producidas en la región, favorecerá el desarrollo turístico del sector, generará y alentará la actividad económica en la región de Artibonite, disminuirá los tiempos de tránsito y mejorará significativamente la seguridad para todos los usuarios de este vínculo vial”, explicó Abraham.

 

Los ingenieros a cargo en representación de CSI son los uruguayos Mariano Sendic y Esteban López y el peruano Leónidas Aguilar. Ellos tienen la responsabilidad de controlar la ejecución de las tareas de los dos tramos que ya están en marcha, en forma conjunta con otros diez profesionales locales. La función de CSI y AC&A es garantizar al Ministerio de Transporte de Haití que las obras sean ejecutadas de acuerdo al proyecto elaborado.

 

La tarea se cumple pese a las limitaciones que plantean las montañas, que muchas veces obligan a modificar el trazo de la ruta. “Hay que dinamitar algunos pasos y trabajar con cuidado”, señaló el experto.

 

Los problemas no se limitan al momento de ejecutar las tareas, sino que abarcan otros aspectos de la vida cotidiana. “Después de superar algunos inconvenientes iniciales, logramos ubicar un hotel en Ennery que resulta muy agradable y donde nuestro personal se aloja en óptimas condiciones, lo que permite sostener con más comodidad la vida diaria lejos de sus hogares”, apuntó.

 

La expectativa de la firma es terminar el primer tramo de la ruta en enero de 2016, y el segundo un año más tarde. Mientras tanto, la compañía continuará participando en licitaciones por el resto de la carretera y por otras propuestas logísticas, consolidándose en este nuevo mercado.