La importancia de que los médicos y los profesionales de la salud informen a los usuarios sobre las medidas a adoptar para prevenir accidentes de tránsito fue el principal tema abordado durante una teleconferencia organizada por el Colegio Médico del Uruguay, en el marco de la campaña “Mayo amarillo”.
El movimiento “Mayo amarillo” se realiza en más de veinte países para instalar el tema de la siniestralidad vial en la agenda pública a través de actividades coordinadas de todas las instituciones vinculadas al tema. En esta oportunidad, primera en que Uruguay se suma a la campaña, el Colegio Médico organizó una teleconferencia en la que profesionales de todo el país asistieron a la presentación del magister costarricense Roy Rojas, experto en seguridad vial, quien compartió la disertación con el director de la Unidad Nacional de Seguridad Vial (Unasev), Gerardo Barrios, y con el director de la Fundación Unitran, Carlos Cal.
Como anfitrión del evento, Néstor Campos, presidente del Colegio Médico, señaló su preocupación por la escasa sensibilidad popular frente al tema. “Si yo aviso que hay meningitis en cierto lugar, nadie va. Si se realiza una vacunación van todos inmediatamente. Pero si alerto que se pongan casco para andar en moto, nadie se preocupa”, afirmó. “La gente está como vacunada contra esto. Hay que buscar la forma de sensibilizar a la población en general y también a los médicos para que cumplan su rol de prevención y educación”, sostuvo.
Por su parte, Rojas indicó que al inicio de esta década los siniestros de tránsito eran una epidemia, que en cinco años se transformó en pandemia. El profesional destacó los esfuerzos de Uruguay para enfrentar este “drama social” y aseguró que las cifras del país son buenas. De todos modos, alentó a seguir trabajando para alcanzar la meta de reducir 10% los lesionados en tránsito durante este año.
Con una vasta experiencia desarrollada en la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y en la Organización Mundial de la Salud (OMS), s Señaló que la participación de los operadores de salud es clave a la hora de enfrentar esta problemática desde la prevención y la rehabilitación, así como en el manejo y recopilación de datos sobre siniestros, clave para generar políticas públicas efectivas.
Rojas llamó a realizar un abordaje integral del tema, comprometiendo a los gobiernos, los organismos de control, el comercio y los actores vinculados a la salud. Asimismo, instó a que la legislación tenga un rol disuasivo. “Leyes blandengues no sirven. Deben ser leyes con dientes, que aseguren una sanción inmediata. Si hay que esperar una semana para que se adopte una decisión respecto a un conductor alcoholizado, estamos muy mal”, sentenció.
En línea con la propuesta de actuar en forma integrada, Gerardo Barrios afirmó que “no hay solución para este tema si no nos involucramos todos”. En ese sentido, destacó el aporte que puede hacer el personal de la salud para aliviar este “problema social de primer orden” y resaltó que la Unasev nació de un anteproyecto de ley elaborado por médicos que recogían ideas de profesionales de todo el país.
Evitar el uso el teléfono celular mientras se conduce, utilizar correctamente los sistemas de retención infantiles y los cinturones de seguridad, vestir chaleco, banda o campera reflectiva y casco certificado en motocicletas, respetar los límites de velocidad y no conducir bajo el efecto de las drogas y el alcohol fueron los puntos destacados por todos los participantes como aspectos fundamentales a tener en cuenta.
El evento se desarrolló en la sede de la Fundación Peluffo Giguens, y contó con el auspicio de la Academia Nacional de Medicina y el apoyo de la Presidencia de la República, la Unasev, el Centro de Prevención de Accidentes y la OPS.