La tripulación del primer avión de rescate que viajó hacia la remota zona del Océano Índico en la que satélites fotografiaron supuestos restos del vuelo MH370 regresó sin resultados positivos a Perth, la ciudad australiana más próxima, distante unos 2.500 kilómetros del área en la que aparecieron dos objetos que podrían pertenecer al Boeing 777 desaparecido.
La Autoridad de Seguridad Marítima de Australia (AMSA) indicó este jueves que las condiciones meteorológicas impiden una buena visibilidad en la región del mar que deben rastrear las aeronaves, lo que frustró las primeras operaciones en el área.
«El personal de la RAAF P3 no pudo localizar los desechos. Nubes y lluvia limitaron la visibilidad», señaló el organismo en su cuenta de Twitter, en el mismo mensaje que prevé para el futuro nuevos vuelos rumbo a la zona
Según las imágenes del satélite australiano que encendió las alertas sobre posibles desechos del avión de Malaysia Airlines, dos objetos, uno de ellos de 24 metros de largo, se hallan flotando en alguna parte del océano. La zona fue definida por expertos como un verdadero «desierto de mar», en el que las corrientes hacen que se concentre mucha «basura».
John Young, responsable de AMSA, indicó más temprano que «los objetos son difíciles de distinguir en las imágenes. Yo no soy un experto en el análisis de las imágenes, pero quienes lo son dicen que hay señales creíbles».
«Los indicios es que se trata de objetos de un tamaño razonable, probablemente inundados, lo que hace que sean impulsados hacia arriba y abajo del agua», explicó Young.
Las autoridades de AMSA no revelaron a quién pertenece el satélite que captó las imágenes, pero esperan recibir más fotos para realizar un análisis más detallado.