El azúcar, una fuente de energía para el cuerpo, puede hallarse en alimentos como caña, miel, betabeles, frutas y otras plantas. Sin embargo, si uno quiere moderar su consumo, los sustitutos de azúcar son la mejor opción. Al usarlos, puedes seguir disfrutando de un sabor dulce con poquísimas o nulas calorías.

Este Top 5, basado en estudios científicos, puede ayudar a llevar una dieta más equilibrada con el consumo adecuado de edulcorantes no calóricos.

  1. Aspartame, sacarina, esteviósido y sucralosa no alteran los niveles de azúcar en la sangre, según se demostró en un artículo firmado por investigadores de la Universidad de Illinois (EU) y publicado recientemente en el boletín Nature.
  2. El consumo de edulcorantes no calóricos no causa cáncer, dice el Profesor Carlo La Vecchia de la Universidad de Milán (Italia), uno de los autores de un artículo que habla del tema y que fue publicado en los Anales de Oncología de la Academia Oxford y que muestra evidencia de estudios epidemiológicos sobre la falta de asociación entre edulcorantes y el riesgo de padecer diversos males comunes.
  3. No causan alergias ni problemas gastrointestinales en niños, y se pueden incorporar en la dieta de niños y adolescentes como una herramienta adicional para combatir la obesidad y el sobrepeso, según un artículo publicado recientemente por la Sociedad Mexicana de Pediatría.
  4. Las bebidas bajas o sin calorías no modifican el apetito, según los testimonios de un grupo de científicos dirigidos por el Profesor Marc Fantino del Centro para la Investigación Biomédica Aplicada en el Centro Hospitalario Regional Montgelas (Givors-France). El equipo analizó los patrones alimenticios de 80 mujeres y 86 hombres, tanto saludables como con sobrepeso, durante varias semanas y halló que no hubo cambios en las conductas alimenticias sin importar si se consumían bebidas con edulcorantes o agua.
  5. Es posible que sean mejores que el agua para mantener el peso corporal, según una investigación publicada en el International Journal of Obesity. Los investigadores hallaron que los edulcorantes no calóricos satisfacen el deseo de algo dulce sin las calorías del azúcar, favoreciendo el consumo de otros nutrientes y por lo tanto ayudando en la dieta.