El excapitán de la selección inglesa, y gloria del Arsenal, manifestó que sufrió el racismo en su país y acusó a la Federación. Una situación que no cambiará de forma inminente, según Sol.
Sol Campbell fue un zaguero corpulento, rápido, con preciso timing en la marca y un líder nato, sea en el Arsenal FC como en la selección inglesa, a la que defendió en tres mundiales.
Para el defensor, el racismo es moneda corriente en el fútbol de su país. Entrevistado por The Sunday Times el último fin de semana, reconoció que «de haber sido blanco, hubiera sido capitán de Inglaterra durante más de 10 años».
Asimismo, apuntó contra la FA (Federación inglesa), la que «hubiera preferido que hubiese sido blanco. Tenía credibilidad y la experiencia para ser capitán, como jugador y como capitán de equipo. Pero la FA no quería que yo tuviera voz y voto». Luego añadió que no cree que la situación cambie «porque no quieren, ni ellos ni los hinchas».
«Está bien que haya capitanes negros y mezcla de razas en las selecciones Sub-18 y Sub-21, pero no pasa en la mayor», acotó.
Campbell fue capitán de la selección de la rosa en tres ocasiones, todas en partidos amistosos.